Believe

Mirando al horizonte, quizás hallemos nuestro norte.

jueves, 27 de junio de 2013

¿Sin ti? No

Las agujas del reloj giraban sin pausa, su corazón seguía latiendo y sus pulmones respirando pero su memoria no avanzaba. Actuaba acorde con sus recuerdos, sin querer crear nuevos. Le gustaban aquellas sensaciones vividas casi siglos atrás. No se hacía la idea, no quería hacerse la idea, que la vida seguía sin su presencia. Todas las noches, desdes hace años, cogía su foto con ambas manos y la besaba hasta que el aire almacenado en ella practicamente se agotaba, hasta que sus labios no podían aguantar más la fuerza que ejercia su corazón. Le echaba mucho de menos. No cambió de colonia, ni de forma de vestir. La rutina la iba matando poco a poco. La nostalgia cada vez era mayor. Pensaba que no podría más. Jamás llegó a hacerse completamente la idea de que no podía abrazarla. Veía de camino al trabajo a los niños jugando, las chicas cotilleando y los chicos mirandolas, parejas asquerosamente envidiables besandose en aquel banco de película. 

Un día decidió que sin ella no podía estar en este lugar llamado mundo, y tan rápido como lo pensó, actuó. Desde entonces se encuentra de nuevo con su hermana, en un lugar constantemente cuestionado por los que siguen en aquel sitio que ella un día decidió abandonar.

sábado, 15 de junio de 2013

Solemos hablar de amor.

Aquella esencia abstracta, de la que, sin estar enamorado, todos sabemos hablar. Aquel precipicio en el que todos vamos o hemos caido alguna vez y  es maravilloso mientras caes, te sientes como un pajaro volando sin ataduras, pero las caidas tienen un fin, un suelo, que te hace aterrizar, y entonces es cuando te duele. Aquel tema que ha inspirado miles y miles de textos y canciones. Aquella sensación de la que todo el mundo habla, sí, esas mariposas correteando por tu estómago. Aquella palabra con un nombre detrás, con una sonrisa, una mirada... que te pone los pelos punta, como si fuese la primera vez siempre. Aquel motivo de lágrimas, tanto de alegría como de tristeza. Aquel impulso que lleva a actuar distinto con su presencia,acelera el corazón,brillan los ojos, se pone un nudo en la garganta, ascienden los nervios, y entonces es cuando solemos hablar de amor.